Comunicado enviado por el Jardín Botánico a la comunidad universitaria sobre el reciente mantenimiento arbóreo del campus.
Las reseñas históricas se limitan a registrar las acciones emprendidas por la comunidad universitaria para poblar de árboles nuestro campus, las cuales se han efectuado con muy buena intención y pretenden ofrecerle a sus integrantes todos los beneficios que son inherentes a una buena cobertura arbórea.
Sin embargo, el crecimiento de la infraestructura, la falta de normatividad y la ausencia de un programa integrado para el manejo del arbolado que permita efectuar un adecuado mantenimiento de los árboles existentes y una planificación de la nueva arborización, configuran las circunstancias por las cuales actualmente nuestra universidad tiene una arborización madura, con un alto porcentaje de presencia de especies foráneas, con sitios de emplazamiento inadecuados, densidades excesivas y con bajo vigor lo cual sumado a su precario estado físico y sanitario representa para la comunidad alto riesgo para su propia integridad y la de sus bienes.
Nuestra universidad nunca había enmarcado el manejo de su cobertura arbórea dentro del concepto de silvicultura urbana, la cual tiene por finalidad el cultivo y la ordenación de los árboles con miras a aprovechar la contribución actual y potencial que éstos pueden aportar al bienestar de la población, tanto desde el punto de vista fisiológico como sociológico y económico.
La ausencia de ordenación y mantenimiento del manejo de los árboles tiene una repercusión social ya que la excesiva densidad de plantación o la selección de especies inadecuadas en algunas áreas afecta directamente la seguridad de los habitantes, favorece el mal uso de las áreas verdes e impiden su uso natural y la apropiación ciudadana.
Por lo anterior y atendiendo al creciente desarrollo de la universidad, la División de Servicios y el Jardín Botánico UTP han iniciado un proceso para establecer reglas de juego claras que permitan cuidar nuestro recurso forestal y tomar decisiones de vital importancia a fin de lograr un equilibrio.
Debido a ello, se están desarrollando actualmente actividades de normalización del mantenimiento arbóreo, tendientes a prevenir y/o mitigar los riesgos que se generan por falta de planificación en siembras históricas de árboles, los cuales eran establecidos sin que existiera una estrategia de largo plazo que contemplara la selección de especies, selección de sitios de acuerdo a la especie y mucho menos los ciclos de manejo silvicultural que estos requerían.
Por tal motivo en el diagnóstico del presente año se encuentran un total de 170 árboles determinados como prioritarios para realizar: Podas de conformación, de control (123 árboles) o erradicaciones en el campus (7 vivos y 40 muertos, erradicaciones ya realizadas en su totalidad), dando prioridad a los que se encuentran muertos o los que evidencian riesgo para la integridad de instalaciones y/o personas, como son los individuos ubicados bajo las líneas aéreas de conducción eléctrica de alta tensión, o en casos cruzados de riesgo a infraestructuras y de líneas eléctricas. Este último era el caso de los individuos erradicados en la facultad de Ciencias de la salud y Ciencias ambientales.
Las labores actualmente en desarrollo son de alto impacto y controversia, debido a que nunca se habían desarrollado en forma sistemática y continua, de ahora en adelante estas serán de menor impacto visual y de menor envergadura porque serán sólo de mantenimiento y control de lo ejecutado. Los árboles erradicados están siendo objeto de reposición (con especies adecuadas), en la medida de lo posible en zonas aledañas a su ubicación original.
Es necesario aclarar, que no se hace ninguna actividad de manejo arbóreo en la Universidad sin el justificado criterio técnico y científico para realizarla; de igual manera, que el equipo que las ejecuta y toma las decisiones es lo suficientemente competente y se constituyen en los primeros ambientalistas y principales defensores de los recursos naturales en la Universidad, sin embargo, la balanza de la conservación algunas veces se ve inclinada por la necesidad de minimización del riesgo a infraestructuras y principalmente a las personas.
Datos importantes para los más interesados en los árboles y la conservación en la UTP:
Área del campus: 50.5 ha
Área en bosques en Conservación: 31.01 ha
Área del Jardín Botánico: 13.3 ha
Porcentaje de área UTP en bosques: 61.4%
No. de especies vegetales conservadas y presentes en el campus: 387 especies.
No. de especies de valor ecológico sembradas el último año: 117 (La mayoría especies en vía de extinción).