La noche del miércoles 20 al jueves 21 de febrero de 2008 se producirá un eclipse total de Luna visible desde prácticamente todos los continentes del planeta, a excepción del Este de Asia, Australia e Indonesia.



Este fenómeno tiene lugar cuando la Tierra se interpone entre el Sol y la Luna, o lo que es lo mismo, cuando la sombra proyectada de nuestro planeta incide sobre la superficie lunar.

En esta ocasión es especialmente favorable para la zona centroatlántica, el Este de Norteamérica, el continente sudamericano y el Oeste de Europa, concretamente para la Península Ibérica, Francia, Reino Unido y parte de la Península Escandinava, ya que el eclipse tiene lugar durante la segunda mitad de la noche. Se trata además del último eclipse lunar total en estos años, pues aunque se producirán algunos eclipses parciales o penumbrales en los posteriores meses, no se observarán más eclipses de Luna totales en el continente europeo hasta diciembre de 2010 y es el último total que se verá íntegramente desde Sudamérica en 7 años (hasta el 28 de Septiembre de 2015).

Un eclipse lunar es un evento astronómico muy sencillo y seguro de observar. No es necesario el uso de instrumental alguno para contemplarlo, si bien unos prismáticos fijados sobre un trípode o un pequeño telescopio lo harán aún más llamativo. La fotografía del fenómeno sin telescopio -tanto química como digital- no deja de ser interesante, siendo para ello imprescindible situar la cámara sobre un trípode.

Los observadores mas favorecidos para la observación de este fenómeno son los situados en el Este de Norteamérica y en toda Sudamérica, así como aquellos que se encuentren en el Oeste de Europa y África. Desde otros puntos del planeta el fenómeno también podrá observarse, pero no en su totalidad, pues dependiendo de la situación geográfica en donde nos encontremos, la Luna surgirá por el horizonte Este cuando el eclipse ya haya comenzado o se ocultará por el horizonte Oeste antes de que haya concluido.
De esta forma, los observadores situados en el Este de EEUU o Canadá verán salir la Luna parcialmente eclipsada por el horizonte Este y podrán contemplar el fenómeno hasta una vez finalizado. Por otra parte, aquellos localizados en el Oeste de África, Oriente Medio o Este del continente asiático podrán ver el inicio del fenómeno, pero la Luna se ocultará tras el horizonte Oeste cuando aún no haya concluido.

A continuación de indican las horas a las que tendrán lugar los eventos más importantes del eclipse:

1.- Inicio del eclipse penumbral: 7:35.
2.- Inicio del eclipse parcial: 8:43.
3.- Inicio del eclipse total: 10:01.
4.- Máximo del eclipse: 10:26.
5.- Fin del eclipse total: 10:51.
6.- Fin del eclipse parcial: 12:09.
7.- Fin del eclipse penumbral: 1:17.
Estas fases del eclipse se ilustran en la imagen superior, en donde se indican la penumbra y la sombra terrestres, así como la dirección que recorrerá la Luna a través de ambas. Los números se corresponden con las fases indicadas anteriormente.
En el transcurso del fenómeno nuestro satélite natural atravesará primero la zona de penumbra terrestre, fenómeno inobservable al ser prácticamente imperceptible el oscurecimiento que esta produce. Sólo cuando la Luna haga contacto con la sombra terrestre observaremos un oscurecimiento bastante mas acentuado, que irá recorriendo nuestro satélite de Oeste a Este hasta que el globo lunar quede inmerso en la sombra de nuestro planeta, comenzando entonces la fase de totalidad. Aunque nuestro satélite natural no atravesará el centro de la sombra terrestre, la fase total durará 50 minutos. Posteriormente la Luna abandonará progresivamente la sombra terrestre y se irá iluminando de nuevo.
Debido a la geometría del eclipse, la Luna presentará un aspecto más brillante en su región norte que en la sur, pues ésta última se encontrará mucho más sumergida en la sombra terrestre. Nuestro satélite natural atravesará un rango sustancialmente amplio de profundidades umbrales durante el transcurso de la totalidad, de modo que su apariencia cambiará notablemente con el tiempo, presentando una tonalidad progresivamente más rojiza según el fenómeno se aproxime al máximo. Durante el transcurso del fenómeno la Luna se encontrará en la constelación de Leo, siendo visibles -especialmente durante la totalidad- la brillante estrella Régulus y el planeta Saturno, ambos próximos a nuestro satélite natural.

El Grupo de Astronomía Orión y el Planetario invitan a todas las personas a observar este evento celeste (que no volverá a ocurrir hasta el 2015) en las canchas de microfútbol cerca de la Facultad de medicina el próximo miércoles 20 de febrero a partir de las 7:00 de la noche.