Informes escritos por los pasantes mexicanos sobre su experiencia en la Universidad Tecnológica de Pereira.
Vale la pena mencionar que esta movilidad se dio gracias al convenio entre la Universidad Tecnológica de Xicotepec de Juárez, Puebla y la Universidad Tecnológica de Pereira.
Por: Inés Manuel Cresencio, quien visitó la Escuela de Tecnología Química
Mi nombre es Inés Manuel Cresencio, estudiante de la Universidad Tecnológica de Xicotepec de Juárez, Puebla, México. La pasantía que hice en la Universidad Tecnológica de Pereira fue muy provechosa y satisfactoria académicamente y culturalmente. Resulta de gran importancia este tipo de intercambios académicos, porque así les dan la oportunidad a personas como yo, de ver nuevas expectativas y nuevos retos. Me alegró mucho tratar con gente parecida a la de México, hospitalarios, amables y con un amor por la vida que deja a cualquier extranjero con la sensación de volver.
En relación con lo académico, fue muy interesante poder llevar a cabo actividades que en nuestra universidad no se puede, ya sea por falta de equipos o laboratorios destinados a algún análisis en especifico, como por ejemplo el laboratorio de Análisis de Aguas, Calidad de Productos Naturales y Análisis de Suelos, en los que tuve la oportunidad de llevar a cabo algunas practicas y adquirir nuevos conocimientos y nuevas experiencias. Quizás al principio si se me hizo un poco difícil acoplarme al ambiente al que están acostumbrados a vivir acá, igual por falta de mi familia y amigos, sin embargo con el paso del tiempo, la manera en que la gente con la que tuve el gusto de convivir me dio la confianza para agruparme a las vivencias nuevas, hizo que la estancia después de la segunda semana de haber llegado a Pereira se hiciera mas amena y mas cómoda.
Ahora puedo decir que si algún día recibo una invitación para volver por parte de algún amigo o compañero con los que me relacione en la universidad o fuera de ella, la respuesta seria “desde luego que si, con gusto”, y si no se diera el caso, volvería con o sin invitación.
Colombia tiene mucho que ofrecer, y yo como extranjera mucho que aprovechar, claro nada con exceso, todo con medida.
Por: Gustavo Urbina Cortes, quien visitó la Escuela de Tecnología Mecánica
Mi estancia en Colombia fue muy placentera, fue una experiencia muy agradable y que además me dio en lo personal muchas enseñanzas tanto en mi vida académica como en mi vida moral, en el aspecto cultural, en la manera de pensar de personas en una forma de vida muy distinta a la mía.
A pesar de que cuando llegue tuve algunos imprevistos con respecto al pago de impuestos considero que el estar aquí fue una experiencia muy importante y que además me va a servir en mi vida futura.
Al principio fue un poco difícil adaptarse a la comida que hay en Colombia ya que es muy distinta a la de mi país pero en realidad sólo fue una etapa de adaptación, ya que hay una variedad de platos muy ricos los cuales disfrute mucho.
Yo conocí algunos lugares de Colombia como Quimbaya, Montenegro, Bugalagrande, Tulúa, Armenia, Andalucía, Cartago etc., los cuales me parecieron muy agradables además de que la gente me recibió con los brazos abiertos y ofreciéndome de la mejor manera su casa por lo tanto yo quede maravillado con la hospitalidad de las personas y me olvide un poco de que vengo del extranjero, en resumen me hicieron sentir como en casa.
Realmente mi experiencia en donde viví me ayudo mucho en el aspecto de hacerme un poco más responsable y a pesar de que tuve más obligaciones de las que tengo comúnmente en la casa, donde yo estuve durante esta estancia el ambiente con las personas era muy bueno ya que todos fueron de confianza y me trataron muy bien.
En el ámbito académico me sirvió ya que profundice algunos temas los cuales solo había visto a grandes rasgos y que por cierto fueron de mucho interés para mi, aparte de que los ingenieros que me impartían clases eran muy amigables lo cual considero muy importante ya que a uno le brindan la confianza para aclarar las dudas existentes. La familia que me recibió fue muy gentil y me lleve a la perfección con ellos.
Las mujeres colombianas son muy hermosas por lo tanto uno se queda con ganas de regresar a deleitar la vista.
Para terminar en Colombia me sentí muy bien en todos los aspectos me voy comprobando que estuve en un lugar muy agradable y pues a recomendar a mis paisanos que visiten esta muy hermosa nación, y claro a todas las amistades de aquí brindarles mi país ya que México también es muy agradable, y muy vacano jejeje. Si Dios me lo permite yo regreso.
Por: Antonio Trejo González, quien visitó la Escuela de Tecnología Eléctrica
Relatando la experiencia que viví en Colombia conocí y disfruté en lo que cabe de todo, es un país que por su situación geográfica ofrece paisajes impresionantes los cuales se pueden contemplar por horas y horas. Pereira donde llevé a cabo mi estadía como alumno de intercambio es una ciudad bonita, segura (excepto en algunos lugares) de mucho comercio y en la parte de Cerritos es un lugar en el cual uno puede encontrar fincas para descansar los fines de semana o pasarla bien en compañía de la familia o de los amigos, hacer carne asada asolearse o refrescarse en la piscina en fin ofrece bellos lugares.
La calidez de su gente se hace notar en el buen trato con el que se dirigen hacia nuestra persona, excepto el trato que recibí de algunos funcionarios de DAS que no fue nada agradable sino más bien de carácter prepotente y yo me pegunto ¿es este acaso el trato y la imagen que el turismo o la gente que por necesidad estamos acá nos debemos llevar de Colombia? Porque podemos pensar un sinfín de cosas pero dejemos atrás este tema sólo una observación que designen personal responsable, capacitado y que sepa desempeñar su cargo como tal para sentirnos como en casa.
En la gastronomía encontramos comidas como el sancocho, la bandeja paisa, la chunchurria que no se que sea pero cada rato la nombran así como la mazamorra que en México es parecida a los famosos esquites pero sin leche, bueno de todo esto y más que me faltó por nombrar no me gustó nada, claro estamos hablando de una gastronomía muy diferente a la que uno está acostumbrado y es por eso que nos cuesta un poco adaptarnos a tal comida, pero si me pidieran una opinión acerca de este tema en lo personal y no es por nada pero Colombia se llevaría una baja calificación y una fuerte crítica en su gastronomía tal es el caso que desde que estoy aquí en este país he bajado aproximadamente 10 kilos por la razón de la comida, les hace falta un poco el toque del sazón para darle vida a su gastronomía.
En la parte académica en la desarrollé mi proyecto de estadía fue una experiencia de las que pocas llegamos a pasar en nuestra vida, aprendí mucho me brindaron los conocimientos necesarios para mi formación como tal en el desarrollo del proyecto el apoyo fue incondicional mis asesores así como el director de la carrera me apoyaron en más de lo que yo necesitaba, su nivel académico es muy bueno, sus alumnos tienen visión de superarse y de compañerismo mutuo y la capacidad que tienen sus maestros para impartir el conocimiento a los alumnos es de excelente calidad por esa parte no hay reclamo alguno y no me queda mas que darle las gracias a todas esas personas que me apoyaron en mi proyecto y que aportaron su tiempo y dedicación para que yo culminara satisfactoriamente el objetivo por el cual vine.
La familia que me aceptó en su casa durante todo este tiempo me brindó el cariño y el calor de un hogar para que yo me sintiera como en casa, son unas personas de lo más lindo y les agradezco de todo corazón el haberme aceptado y aguantado todo este tiempo en el seno de su familia.
Para terminar fue una experiencia muy bonita pasé bueno mientras estuve aquí, qué daría por quedarme unos días más y disfrutar de todo lo hermoso que poseen y de esas niñas tan lindas que se dejan ver por todo Pereira, gracias y espero algún día volver y disfrutar de lo que hoy me llevo un bonito recuerdo gracias.