Comunicado enviado por el profesor Miguel Antonio Alvarez, Presidente de Aspu Risaralda.



Comunicado Conjunto
Corpuv- Aspuvalle

De nuevo una sombra que pretende cubrir…


Hoy nos embarga un dolor profundo; la perdida de un miembro de la nuestra comunidad universitaria en manos de fuerzas oscuras nos conmueve y consterna. El estudiante del programa académico Atención Prehospitalaria Julián Andrés Hurtado miembro de una humilde familia vallecaucana ha sido asesinado. Desde el estamento profesoral queremos hacer llegar nuestra voz de condolencia a su señora madre y a sus hermanos a ellos queremos decirle que su pesadumbre es compartida por nosotros. Y no es para menos Julián era un miembro del estamento estudiantil, sus condiciones humanas y sus valores lo convirtieron en un valuarte de la defensa de la Universidad. De hecho fue un representante estudiantil al consejo académico y desde el siempre mantuvo una posición abierta hacia el dialogo y hacia la búsqueda de soluciones a las diferentes problemáticas que aquejan a nuestra Alma Mater.

En este estado de consternación, nos pasan muchas dudas e interrogantes por nuestra mente ¿Que intereses pueden mover hacia el asesinato de un estudiante universitario?; ¿Qué pretenden las fuerzas oscuras con actos de amenazas y agresiones para con los miembros de la universidad?; ¿Cuáles son los métodos que se están usando en contra de la universidad pública para desestabilizarla?; ¿Quiénes son los enemigos de la Educación Superior?...Lo cierto del caso es que el crimen de Julián no puede ser asumido como una acción más que engrosará las cifras de la epidemiología social. En la realidad esta perdida es significativa, no sólo por el luto que nos ocasiona sino porque nos muestra una realidad de violencia, amenazas, persecuciones y eliminaciones sistemáticas a quienes piensen diferente y esa es una constante que vivimos los miembros de las Universidades Públicas de este país.

Pero ante esta realidad el gran interrogante es: ¿qué hacemos frente a todas las amenzaas y en especial contra las que atentan contra la vida y la integridad de los seres humanos que pertenecemos a las comunidades universitarias? No cabe duda que tendremos que levantarnos y al unísono pronunciar nuestras más enérgicas voces de protesta, pero ante todo el llamado es a cerrar filas en defensa de la universidad, de la democracia y ante todo de la vida. Sólo en la unificación de la indignación por las agresiones recibidas podemos superar los estados de anomia y temor en los que se nos quiere sumergir.

Por lo tanto invitamos a toda la comunidad universitaria para que nos unamos en claustros, asambleas, jornadas de reflexión e introspección alrededor de la Universidad que queremos y a la que defenderemos contra toda agresión.