El pasado domingo 23 de abril se celebró el día el idioma, el cual conmemora varias fechas importantes como el fallecimiento de nuestro inmortal Cervantes (1616), el natalicio del universal William Shakespeare (1564), y de nuestro hombre de letras y político Marco Fidel Suárez (1856, Bello Antioquia).



Al destacar a Cervantes, se destaca también la obra que lo hizo inmortal, el Ingenioso Hidalgo don Quijote de la Mancha, por esto el 23 de abril se constituye en el día del libro y de quienes lo protegen y conservan: Los bibliotecólogos y los bibliotecarios.

Esta es una valiosa oportunidad para destacar el papel que la Biblioteca desempeña en el ámbito de la información y el conocimiento. Años han pasado desde que las bibliotecas eran estrechos y silenciosos recintos donde pocos podían llegar, y los libros, tesoros que no se difundían sino que se escondían y protegían.

Hoy las bibliotecas han evolucionado a pasos agigantados, de los polvorientos anaqueles queda poco. Cada vez más nos hemos dado cuenta de que lo importante no es tener toda la información sino saber dónde está y como conseguirla, y así, satisfacer las necesidades de los usuarios.

Las tecnologías de información han convertido a las bibliotecas en unidades ágiles, eficientes y eficaces frente a los desafíos de un mundo cada vez más dinámico y complejo.

La Biblioteca Jorge Roa Martínez ha venido en un proceso de desarrollo y fortalecimiento, que le ha permitido estar a la altura de las circunstancias universitarias actuales. Cada vez más, gracias al apoyo de las directivas de la UTP ha crecido tanto en sus colecciones como en la calidad de sus procesos. Por ello, podemos decir que estamos frente a una biblioteca que está al nivel de las mejores del país y que es modelo de la Región Centro Occidente.

Sea esta una oportunidad para felicitar a todo el equipo de trabajo de la Biblioteca Jorge Roa Martínez, porque gracias a ellos y al trabajo cooperativo ha sido posible este proceso de mejoramiento continuo, tanto en los procesos internos como en los diferentes servicios.

Invitamos a toda la comunidad universitaria a visitarnos, a cuidar de ese “cuerpo de paz" cuyas instalaciones en ocasiones han sido tan injustamente convertidas en campos de batalla, pues la biblioteca es un tesoro invaluable del saber. Aprovechemos lo que Emerson llamaba “ese gabinete mágico donde están los mayores genios de la humanidad”