Comunicado enviado a toda la comunidad universitaria por el profesor Fabio Cardona Muñoz, Tesorero ASPU Risaralda.



Rescatemos el Derecho a Opinar Libremente

Dos comunicaciones se han dado con motivo de mi escrito titulado “Miedo, Simpatía o igual Estilo” y al respeto hago algunas precisiones:

1. En la Universidad sólo están a punto de ser derrotadas la precaria democracia, la libre opinión y los espacios para el debate. Opinar cada vez se vuelve más difícil en la universidad porque muchos directivos manejan la política de que el que no está conmigo está contra mí y así a algunos de los profesores, tanto de planta como ocasionales, les es imposible expresarse libremente por razones que todos saben o imaginan.

2. Ha ganado buen espacio la política del amedrantamiento, hay colegas que desean expresar sus puntos de vista críticos acerca del manejo de ciertos procesos académicos y administrativos pero deben callar por la necesidad que tienen de ser contratados.

3. La debilidad de las ideas de que habla el Doctor Germán López Quintero, lo son para él, porque son contrarias a las de la privatización, la ampliación de la cobertura sin calidad, y a la solicitud de la democratización de las decisiones académicas, tomadas por la actual administración de la Universidad. Las ideas sobre la universidad democrática y de calidad que proponemos están consignadas en el documento AMSES (Acuerdo Marco Sectorial para la Ecuación Superior), elaborado conjuntamente por la Federación de Profesores Universitarios y Sintraunicol y presentado años atrás al Gobierno Nacional.

4. Del trabajo en equipo de las unidades académicas, como las Salas de Profesores, los Comités Curriculares, los Consejos de Facultad no se han dado en forma general en todos ellos, por ejemplo en la Facultad de Ciencias Básicas no se ha consultado ni debatido colectivamente la conveniencia o no de muchas de las decisiones tomadas por el Consejo Superior y que son de competencia académica, como por ejemplo:
a) Limitar a una sola vez el período sabático y sólo para proyectos de investigación, desconociendo la labor tesonera y de apostolado que los docentes realizamos día a día buscando mejorar las metodologías de enseñanza.
b) La exigencia de estudios de Maestría para ser docentes de planta decisión que en el fondo propende por exonerar a la institución de la responsabilidad de capacitar a sus profesores y que es consecuente con la opinión de un pasado miembro del Consejo Superior que a propósito de las Comisiones de Estudio decía que los profesores debían llegar aprendidos. Lo anterior se ha convertido en un serio obstáculo para llenar las vacantes mediante el concurso público de méritos.
c) La autorización para que los catedráticos dicten hasta 20 horas semanales sin ninguna reglamentación. Esto último suscitó incluso una discusión en el Consejo Académico por no habérseles tenido en cuenta, discusión que culmina con la aprobación de un comunicado al Conejo Superior manifestando su inconformidad y que con extrañeza aún no ha salido a la luz pública.
Y otras más.

5. Desde mucho tiempo antes de llegar la actual administración, la Universidad Tecnológica de Pereira venía siendo reconocida nacionalmente como una Universidad de calidad académica y los egresados de las diferentes Tecnologías e Ingenierías eran solicitados permanentemente por grandes empresas naciones; y la calidad y prestigio se debió a la labor profesional de los docentes vinculados antes del año 2000, muchos de ellos ausentes hoy de la Universidad y otros pocos que quedamos resistiéndonos a la autocracia y a las políticas de autofinanciación, de ampliación de cobertura sin calidad y de promoción automática. Por esto es un atrevimiento pretender afirmar que la historia de la Universidad comenzó hace 6 años con esta administración como lo han expresado abiertamente en diferentes espacios.
No es que la comunidad universitaria ni los docentes nos hayan simplemente tolerado, sino que han reconocido que históricamente la Asociación Sindical de Profesores Universitarios ha sido la organización gremial que ha defendido y aún defiende los derechos laborales y además propende por más y mejores condiciones de trabajo en el marco de la defensa de la universidad pública. Los nuevos docentes, los recién vinculados son colegas que por diversas razones, algunos no conocen la historia de cómo las luchas sindicales libradas regional y nacionalmente nos han permitido conservar hasta ahora el carácter público de la Universidad y que el declinar en este empeño conllevará a la privatización o liquidación total de las universidades, como se puede advertir en el caso de la Universidad del Atlántico. Por más que se nos califique de Dinosaurios por conservar el paro, la manifestación callejera, las consignas antiimperialistas (hoy más vigentes que nunca con el TLC) y las consignas antigubernamentales como métodos de protesta, estas son y seguirán siendo válidas por mucho tiempo. Basta ver y leer las recientes noticias de las concurridas manifestaciones del pueblo Ecuatoriano en contra del T.L.C., las multitudinarias manifestaciones callejeras de los trabajadores y estudiantes Franceses en contra de las lesivas reformas laborales, las protestas populares en el mismo seno del imperialismo norteamericano contra la invasión a Irak, de los latinos por una ley de inmigración que les permita la legalización de su permanencia en ese país, la gran marcha universitaria de Cartagena a Barranquilla y otras más acciones de otros pueblos en el mundo que se defienden de la agresión imperialista de todo tipo. Si por avalar y tomar como propios estos métodos se nos llama dinosaurios, con orgullo aceptamos tal calificativo.

6. Las decisiones académicas o de cualquier otra naturaleza que tome cualquier organismo de dirección universitaria, en última instancia nos compete a todos, desconocer esto sólo pretende ocultar y justificar las actuaciones inconsultas y antidemocráticas que caracterizan la actual administración. Por ello considero que todo lo que tenga que ver con los asuntos académicos debe discutirse en las Salas de Profesores y que los directivos (jefes inmediatos) deberían presentar al representante ante los organismos de dirección académica y universitaria para que sean llevados y defendidos en su interior. Por eso la afirmación de que el representante de las directivas académicas sólo le debe rendir cuentas a los directivos académicos no se corresponde a una postura universitaria progresista sino retardataria y discriminatoria. Aun así, a la gran mayoría de ellas, no les han sido consultadas las decisiones del C. S. mencionadas antes.

7. Es importante recordar que la sala de profesores envió una comunicación al Consejo Superior donde a pesar de apoyar el comunicado de Tecnología Industrial que pedía la derogatoria del acuerdo del 16 de diciembre pasado, presentaba alternativas parar ser consecuente con la intención de “mejorar” las condiciones económicas y de trabajo para los profesores ocasionales, pero esto parece no importarle al profesor Mesa puesto que en su comunicación no hace ninguna referencia a dicho comunicado ni al Consejo Superior que le propuso a nuestro representante profesoral que elaborara una propuesta de modificación del acuerdo y que este organismo la consideraría en una próxima reunión y negó el que fuera una comisión autorizada por el Superior para examinar el tema y con base en un proceso de concertación se elaborara una nueva propuesta que posteriormente se sometería a su aprobación.

8. Finalmente con el propósito de elaborar una adecuada reglamentación para la permanencia por méritos de los actuales profesores ocasionales y la vinculación a futuro de otros, invito al decano de la Facultad de Ciencias Básicas y a los directores de los correspondientes departamentos a que conjuntamente con ellos y algunos profesores de planta y transitorios se conforme una comisión oficial de carácter decisorio que construya una propuesta que dignifique, aún más, el trabajo de estos colegas.

Hay un refrán popular muy conocido que dice: Al que le caiga el guante que se lo chante, y para algunos compañeros y colegas les quiero recordar una frase de Gandhi:

“Lo malo de las cosas malas de la gente mala es el silencio de la gente buena”

Pereira, 30 de marzo de 2006


Fabio Cardona Muñoz
Tesorero ASPU Risaralda