El profesor Hugo López envía el siguiente comunicado firmado por el profesor Bernardo Arango Mercado, para toda la comunidad universitaria.



Compañeros, profesores, estudiantes y egresados de la facultad de Ciencias Ambientales.

Estuve atento en el cara a cara de los candidatos a la Decanatura de la Facultad de Ciencias Ambientales, en el auditorio de Medicina, este Miercoles 2 de marzo. Bien. A raíz de ese evento, estos son mis comentarios.

No es la mejor manera de hacer campaña, irse lanza en ristre contra el Decano y despotricar desde las vísceras de un hombre a quien tanto le debe la Facultad.
El aspirante a Decano, profesor Jhoniers Guerrero, no está al tanto de la gestión de excelencia que el Dr. Ospina ha hecho en beneficio de la Facultad. Las muy buenas relaciones personales que el Señor Decano tiene con personajes de la vida nacional, las ha aprovechado en pro del presente y futuro de esta Dependencia.

Entre muchas acciones de gerencia y gestión en el cargo sólo mencionaré las que articulan la facultad con el medio externo: A él y mediante él se lograron muchos convenios y alianzas con el mundo institucional y productivo, que no son únicamente con entes nacionales sino también internacionales.

Pero hablando internamente, ¿sabrá el Profesor Guerrero, mencionando algunos resultados, que gracias a la capacidad de gestión del Dr. Ospina se hicieron realidad los laboratorios de Aguas, de biotecnología y del SIG, y la capacitación de los profesores incluyendo la de él mismo Profesor Guerrero?.

(Gestos tradicionalmente discrecionales de los Decanos) ¿Hubiese sido posible el evento internacional de Guadua sin la intervención del Dr. Ospina, evento este que internacionalizó la imagen de la Facultad? La prueba del éxito de su gestión concluye con la obtención de la acreditación, después de haber logrado reunir a los profesores en esa delicada responsabilidad en torno a la importancia de analizar el programa a la evaluación de pares. Que el Dr. Ospina mantenga la discreción y no salga a pregonar a los cuatro vientos su exitosa gestión, no le quita méritos, por el contrario, a quien se entera de la fuente de su misión, le da los que se merece y lamenta su retiro. Ojalá siga tutelando la facultad desde su retiro honroso para bien de la facultad y de la Universidad.

En fin, el profesor Jhoniers Guerrero, en su presentación se muestra un hombre demasiado apasionado, subjetivo y sesgado para ver las realidades, aquellas que deben ver todos los que aspiren a un cargo de tanta responsabilidad. Sus gestos en la mesa, pantomímicos y patéticos, le hicieron un flaco favor a él mismo, frente a la mesura y compostura de los otros dos candidatos. No me cabe la menor duda de que los destinos de la Facultad los debe dirigir el Dr. Samuel Guzmán. El más entendido, sereno, y profundo de todos. El más equilibrado y tranquilo, el más sensato y realista.

Bernardo Arango Mercado.
Catedrático



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