El realizador documental americano Larry Hott estuvo visitando la UTP en el marco del evento denominado Imaginatón, en el que los estudiantes del programa de Licenciatura en Comunicación e Informática Educativas, pudieron conocer las experiencias del estadounidense y recibir consejos para mejorar su trabajo audiovisual.
La Oficina de Comunicaciones habló con Larry Hott sobre su visita y su experiencia documental.
Oficina de Comunicaciones: ¿Cómo se gestionó su visita a la UTP?
Larry Hott: Estoy en Colombia como parte de un programa grande de Estados Unidos del Departamento de Estado y muchas organizaciones de arte en Estados Unidos y en Colombia con organizaciones de arte para hacer programas así, estuve en Bogotá y Cali, ahora estoy en Pereira y luego a Barranquilla y Medellín, para seguir realizando estos programas.
OC: ¿Cómo ha sido su experiencia como director de cine y televisión?
LH: He sido productor desde hace 32 años, he producido al menos 25 documentales grandes para televisión pública, trabajo con mi esposa, ella es mi editora, tratamos documentales sobre derechos humanos y el medio ambiente, porque queremos lograr cambios sociales.
OC: ¿Qué fue lo que lo motivó hace 32 años cuando decidió ser director de cine y televisión?
LH: A mí me gusta mucho, es una buena vida, aunque económicamente es difícil, trabajo con mi esposa y es un negocio familiar. Hay muchos trucos para sobrevivir en éste negocio, por ejemplo doy clases en la universidad y recibo regalías por los documentales que hago, no es una vida sencilla pero es mejor que mi vida pasada, fui un abogado y es una buena profesión para preparar a un documentalista.
OC: Olvidando los aspectos económicos ¿qué es lo bueno y lo malo de ser director de cine y televisión?
LH: Disfruto mucho la vida de un director porque tengo control, poder, yo puedo trabajar con un grupo y soy el dirigente, disfruto mucho la experiencia, es de mucha creatividad especialmente en la sala de edición, mi esposa y yo cada día discutimos sobre las ideas para los documentales, también es una vida que tiene mucha oportunidad para viajar y conocer mucha gente diferente en todo el mundo.
OC: ¿Ha logrado alguna transformación social con los documentales que ha hecho?
LH: Claro, por ejemplo mi primera película fue sobre derechos sobre los ríos y aguas del estado, después del documental la cámara de estado hizo un documento ley para controlar la problemática. Además hice dos documentales sobre la historia de los ambientalistas y el gobierno los utilizó para entrenar empleados del gobierno. Por otra parte una película sobre enfermeras, y dos mil colegios están usando la película para que los estudiantes aprendan sobre esa profesión.
OC: ¿Cómo es la experiencia de crear una empresa con su esposa?
LH: Mi esposa y yo tenemos una buena relación, aunque es difícil trabajar con tu esposa desde hace 32 años, funciona, yo pienso que es mejor para una compañía de documentalistas tener compañeros comprometido y tenemos un compromiso fuerte, y podemos sobrevivir porque no tengo que pagarle a mi esposa (risas), podemos compartir todo lo del presupuesto, es más fácil continuar aunque no tenemos suficiente dinero para todos, cuando tengo que contratar con un editor fuera de la compañía es más caro.
OC: ¿Ha hecho documental comunitario?
LH: Sí, cuando comencé a vivir como documentalista, hice cuatro documentales con otros abogados para informar a las personas desfavorecidas sobre la manera de usar las cortes, el sistema de seguros y otros temas así.
He hecho un documental sobre la comunidad camboyana en Estados Unidos, porque ellos son inmigrantes con muchos problemas.
A mí me gusta cambiar el tema, no es interesante hacer siempre lo mismo, pero tengo fama de documentalista del medio ambiente, por supuesto yo he recibido muchas propuestas para documentales en éste tema, aunque no estoy aburrido yo prefiero otros temas, por ejemplo ahora estamos produciendo un documental sobre una guerra famosa en Estados Unidos, es un cambio bueno para mí, porque tengo que hacer creaciones con muchos soldados, efectos especiales, incendios, armas y cañones y es un buen cambio.
LH: Yo cada día me levanto con sorpresa que tengo una vida así, cuando era joven nunca creí que tendría la facilidad de tener una vida como cineasta y después de muchos años como abogado yo recibí una llamada de otra cineasta, y me preguntó si quería tener éste tipo de vida, y dije ¿por qué no?
Mi consejo es que ustedes pueden probar, es mejor empezar cuando se es joven, cambien su vida.