Las esculturas fueron trabajadas en piedra, metal y combinaciones con madera. 7 artistas internacionales y 5 nacionales plasmaron sus ideas.



Los rostros quemados por el sol y el frío del altiplano, algunas heridas en las manos por manipular la piedra, el fierro o las planchas de metal. Nada de esto borró la sonrisa de los 12 rostros que ayer entregaron el fruto de su creatividad y esfuerzo a los habitantes de El Alto. Los artistas convocados por la Alcaldía terminaron, en los 12 días previstos, la construcción de la cruz andina vista por ojos contemporáneos.

Mientras la ruidosa grúa levantaba la pesada y sólida estructura roja de metal, de más de cinco metros de alto, y los ayudantes buscaban ubicar las otras obras; un grupo de yatiris preparaba el ritual aymara, para que las “almas reciban la ofrenda”. Unas almas que se fueron en octubre de 2003, en la revuelta por la defensa de los recursos hidrocarburíferos del país.

“El único que me trató mal fue el clima. La gente es extraordinaria por su orgullo de ser aymaras y porque cada corazón está lleno de solidaridad”. Éste fue el comentario del venezolano Javier Level que talló en granito una cruz encerrada en el centro de un marco de piedra y madera.

Los predios de la Fuerza Aérea Boliviana, al ingreso del aeropuerto internacional de El Alto, fueron el escenario festivo de clausura del I Simposio Internacional de Escultura Monumental.

Al acto asistieron los artistas, los embajadores de México y Venezuela, el alcalde José Luis Paredes, su esposa Luz Bolivia que consiguió el respaldo e impulsó el simposio, representantes del Gobierno e invitados.

El ecuatoriano Jesús Cobo resumió el sentido del trabajo contando que, al principio, sus ayudantes alteños apenas se atrevían a dar cuerpo a la maqueta. “Al final ellos se apropiaron de la obra y la sintieron suya”.

Paredes explicó que en el simposio se “expresaron diferentes manifestaciones sobre la esencia de nuestra raza, que se traduce en la cruz andina. Es la forma de rendir un homenaje a los mártires del gas”.

El artista boliviano Gastón Ugalde precisó que este es el primer encuentro que se concreta como ejemplo para otras urbes. “Una de las ciudades más abandonadas del país se atrevió a hacer algo de esta naturaleza”.

Si “tenemos un simposio cada dos años, en 10 años tendremos 100 esculturas”. Lo que beneficia a la gente, a la ciudad.

Las esculturas y su lugar de ubicación
Las cruces andinas fueron trabajadas por siete escultores internacionales y cinco bolivianos. Estarán dos meses en los predios del aeropuerto.

ARGENTINA
Tunupa • Es el nombre de la obra de Eduardo Rodríguez del Pino, que está labrada en piedra comanche. Pesa más de 10 toneladas. Aún no se definió el lugar donde se ubicará.

ECUADOR
Cruz Andina • La obra realizada en hierro le pertenece a Jesús Cobo y tiene una altura de más de 4 metros. Estará ubicada en la carretera a Viacha, a la salida de El Alto.

MÉXICO
Bolivia 23-30 • La escultura hecha en base a restos de fierros y cables le pertenece a Javier Astorga. Pesa 3,5 toneladas y mide 4,8 m de alto y 3,5 m de diámetro. Estará en el desvío a Río Seco.

VENEZUELA
Chakata en reflejo • Le pertenece al escultor Javier Level y está hecho en piedra granítica y madera. Estará sobre un pedestal que ocupará una de las salas del futuro Palacio de Artes.

COLOMBIA
Puerta para el Sol • La piedra fue trabajada por Juan Salazar. Mide 5 metros de altura y pesa 6 toneladas. La escultura se erigirá en la plaza Bolivia de Ciudad Satélite.

PERÚ
La Cruz Cuadrada • Trabajo de Miguel Ángel Vélit, hecho en piedra y fierro. Mide cerca a 8 metros y pesa 3 toneladas. Será ubicado al final de la avenida Cívica, ingreso a Achocalla.

CUBA
Cruz Andina • Trabajo de José Villa, logrado con planchas de metal. Mide 4 metros, pesa casi 900 kilos. Estará frente a la salida del aeropuerto internacional de El Alto.

BOLIVIA
Cruz Andina • Sobre piedra de arenisca roja, Gastón Ugalde talló su obra que tiene 6 metros de altura y pesa 12 toneladas. Estará cerca del parque de la Mancomunidad.

BOLIVIA
Cruz Andina • Las planchas de metal cambiaron en manos de Carlos Cordero. La obra pesa 12 toneladas y estará en la plaza Marcelo Quiroga Santa Cruz, ingreso a Pasankeri.

BOLIVIA
Cruz Mágica • Fernando Montes elaboró su escultura en fierro. Pesa 4,5 toneladas y mide 6 metros de altura. Será ubicada sobre el desvío a dos carreteras: Copacabana y Tiwanaku.

BOLIVIA
Puerta de la Cruz Andina • Trabajo de Francine Secretan, elaborado en metal, tiene más de 7 metros de altura. Será colocado en el ingreso a la autopista de la Mario Mercado.

BOLIVIA
El ojo del universo • Obra de Raquel Verástegui que está hecha en base a fierros. Pesa 2 toneladas y tiene una altura de 6 metros. Estará en la avenida Bolivia, final Av. Cívica.

Tomado de http://www.galeriaelfaro.com

Misión Cumplida

Hoy, 2 de Octubre podemos decirles que hemos cumplido, que el esfuerzo fue muy grande, tanto y tan pesado como la misma obra y a pesar de los kilos que perdimos,

Los martillazos y los raspones nos sentimos milagrosamente fuertes. Ayer día de la clausura todas las autoridades civiles, militares, diplomáticas esperaban mas de una hora para que llegara el escultor de Colombia a quien como en una película de acción traían desde Viacha en un automóvil que rompió todos los records de velocidad y algunas normas de transito, con el fin de que pudiera echar a tiempo mi discurso, cuando vimos todas las obras allí en el terreno de la fuerza aérea Boliviana se veía un paisaje subreal y enamorador y en donde solo faltaba el Puerto para el sol cuyas 5 toneladas apenas venían lentamente desde Viacha para ser instalada provisionalmente junto a las demás.

El discurso fue conmovedor pues se apreciaba el cansancio y ese sabor hasta ese momento indescriptible del deber cumplido y ante todo por haberle podido demostrar a un país aun escéptico en estas cosas del arte que estos 5 colombianos, a pesar de los pronósticos de algunos, alcanzaron este ideal en lo mas alto al sur de este mundo.

Cristina Rendón Galeano, la gran asistente, registraba la ceremonia de clausura que no pudo ser interrumpida por el mal tiempo y ese granizo golpeador que azotaba las mejillas en forma inclemente, nadie se disperso como sucede en estos casos de tormentas imprevistas. Mientras tanto a unos Kilómetros de allí los tres restantes integrantes de urbano Mauricio Serrano Isaac, Alexander olaya y Alejandro Taborda, dirigían las grúas que acarrearían tan invaluables piedras, frutos de un gran esfuerzo colectivo diurno y nocturno sin bajar en ningún momento la guardia. Todos esperaban desde una curiosa y solidaria estoicidad. Lastimosamente nunca pudimos estrechar la mano de nuestro embajador...nunca la tuvimos, nunca la ofrecieron. La euforia de todos los escultores era algo realmente conmovedor! Y sin precedentes para estos cansados corazones y a los cuales todos abrazaban con fuerza, sus rostros magros y tostados por el poderoso sol de Tiawanacu, barbados, canosos y tiritantes sonreían como niños que acaban de cometer una hermosa angeladura mientras le huíamos al gran isopo del padre Overmayer que nos perseguía con un ensopado trapeador, con semejante frió y a esa altura, con la intención de bendecir nuestras agotadas humanidades. Fue muy significativo este cierre del simposio, pero ante todo el poder cumplirle a nuestras familias, a nuestros patrocinadores, a nuestros colegas artistas, a la doctora luz Adriana por su frecuentado botiquín, a Adriana Arenas por la cámara que aun sigue ilesa, a Viviana Ángel por el abrigo, a Yorlady Ruiz por su constancia durante estos durísimos días de silencio, a Carmenza Marulanda por su apoyo, a John Alex Toro por sus consejos para conquistar a pirry, a Diver Ángel Iguita por su tenorificante compañía, a Gilberto Cardona por su sonrisa! Y la despedida, al país que nos espera y al que tanto extrañamos, pero ante todo a nosotros mismos... a nuestros ideales.

Cinco abrazos por todo lo alto

URBANO una generación de conciencia para todos.

Tomado de http://www.galeriaelfaro.com