Carta Abierta enviada por el profesor Fabio Cardona Muñoz al profesor Vicente Cediel.



Pereira 28 de agosto de 2008

Profesor Vicente Cediel

Usted conoce muy bien que todos los seres humanos tenemos un umbral para el dolor y que después de alcanzarlo, cualquier cantidad de iguales o nuevos dolores, no somos capaces de detectarlos, eso parece haberle ocurrido a usted con los dolores que le produjeron los primeros seis años de la rectoría del ex-profesor Luis Enrique Arango al punto que perdió toda sensibilidad frente al acontecer universitario durante los otros tres añosos que pareciera usted ha olvidado. Pero para bien o para mal acaba de recuperar la sensibilidad perdida y desea experimentar de nuevo la perversa administración que seguramente lo conducirá irremediablemente a alcanzar una vez más el umbral del dolor, al avivar la reelección del ex-profesor Arango. En la relación de razones por las cuales se debería reelegir al actual rector se le quedaron por fuera las siguientes.

1. Aún no ha logrado incrementar los costos de matrícula hasta llevarlos a valores cercanos a los costos reales, para lograr que al Estado se le exonere de esta responsabilidad. Ya el rector lo había considerado como estrategia cuando el 17 de abril pasado en la entrevista con el periódico la Tarde dijo: Si el esperado “salvavidas” no llega a la universidad pública, la única forma de sobrevivir y ampliar cobertura seria que los estudiantes asuman costos que solo se comparan con las universidades privadas.

2. Falta establecer un sistema acusatorio para quienes opinan diferente a la administración en procura de una participación verdaderamente democrática y al lado de este, otro sistema de sanciones severas para castigar el disentir de docentes y administrativos, aunque esto se dé en la practica, debe oficializarse. Ya no se promocionan las salas de profesores para la discusión y elaboración de proyectos académicos. La democracia agoniza en la universidad y se requiere que muera definitivamente.

3. Falta aumentar el poder del Consejo Superior, para que sólo este cuerpo colegiado elija los decanos y acabar de esta forma “con la politiquería “de los profesores en estos eventos.

4. Falta que los programas académicos, se conviertan en programas técnicos y tecnológicos, con una información fragmentada mediante ciclos propedéuticos, porque “definitivamente el llamado a la erudición como paradigma del saber debe cederle el paso a aquel que centra su fortaleza en la capacidad de hacer” Aprender a manipular botones sin que importe el porque funcionan las cosas.

5. Falta concretar toda una política de exclusión de los profesores jubilados y de algunos de planta de todo tipo de contrato docente, puesto que es mas barato contratar estos servicios, con otras entidades externas a la universidad. El reciente cambio a la misión institucional allanó el camino para este propósito.

Fabio Cardona Muñoz