La Contraloría General de la República se pronuncia sobre las denuncias de ASPU Risaralda, sobre la asignación indebida de puntaje salarial a ciertos docentes de la UTP
En días pasados, mediante Oficio 2015EE0011580, fechado el 6 de febrero de 2015, la Gerencia Departamental Colegiada Risaralda de la Contraloría General de la República (CGR), dio Respuesta de Fondoa la denuncia presentada ante ese ente de control por el Presidente de ASPU Risaralda, que trata “con las presuntas irregularidades en que ha incurrido la Universidad Tecnológica de Pereira, en los procesos de asignación y reconocimiento de puntos salariales a algunos docentes por producción intelectual, que tuvieron incidencia en el resultado de los concursos para docentes”.
Como resultado de la investigación de este organismo de control, cuyo ámbito de actuación se circunscribe a ejercer control y vigilar la gestión fiscal de la administración y los particulares o entidades que manejan fondos o bienes de la Nación, como HALLAZGO N° 1, “se estableció que el Comité Interno de Asignación y Reconocimiento de Puntos –CIARP de la Universidad Tecnológica de Pereira, realizó el reconocimiento y pago de puntos salariales a 12 docentes ocasionales o transitorios sin el cumplimiento de los requisitos establecidos para tal efecto, como su tipo de vinculación, la debida divulgación y la publicación por entidades cuyos objetos de los registros mercantiles no incluyen la actividad editorial; pago que asciende a $521.103.342, desde el año 2007 hasta el 2014, valores sin indexar …”. (Destacado en negrillas fuera del texto original). Llama la atención que las mayores sumas corresponden a lo reconocido y pagado a los señoresJHON JAIRO LEÓN SALAZAR ($124.795.518) y JAIRO ALBERTO MENDOZA VARGAS ($90.222.735),expresidente y presidente actual de ASDO UTPrespectivamente y , el primero de ellos quien se desempeñó en la presidencia de ASDO UTP hasta el pasado miércoles 18 de Febrero, funge como uno de los representantes actuales de los docentes en el Consejo Académico.
Además de lo anterior en el denominado HALLAZGO N° 2, “se estableció que el Comité Interno de Asignación y Reconocimiento de Puntos –CIARP de la Universidad Tecnológica de Pereira, realizó el reconocimiento y pago de puntos salariales a 18 docentes sin el cumplimiento de los requisitos establecidos para tal efecto, como la debida divulgación, la publicación por entidades cuyos objetos de los registros mercantiles no incluyen la actividad editorial; pago que asciende a $1.293.786.036, desde el año 2007 hasta el 2014, valores sin indexar …”(Destacado en negrillas fuera del texto original). De esta cuantiosa suma, un poco más de la cuarta parte, el25,4% corresponde a lo pagado al señor FERNANDO MESA ($328.715.700), seguido por los señores GERMÁN CORREA VÉLEZ ($256.474.284), PEDRO PABLO CÁRDENAS ($131.126.983) y JOSÉ RODRIGO GONZÁLEZ ($100.097.423), reportados como coautores de parte de la voluminosa producción reconocida al director del Departamento de Matemáticas, profesor Mesa. En total estos cuatro docentes acumulan el 63,10% ($816.414.390) del dinero recibido por quienes, de acuerdo con lo investigado por la CGR, no deberían haber recibido tal beneficio económico.
Entre las observaciones reportadas en la Respuesta de Fondo emitida por la CGR, además de corroborar lo denunciado en relación con la omisión de requisitos contemplados en el decreto 1279, aparecen otras que dejan al descubierto un proceder torticero, por decir lo menos: asignación de puntos a un libro de texto evaluado por pares con nota inferior a 2.5; en repetidas ocasiones no se rotaron los pares evaluadores; en repetidas ocasiones se asignó un par evaluador sin obtener respuesta alguna. Ello deja al descubierto un tratamiento a este grupo de favorecidos muy diferente al que habitualmente se da al resto de docentes de la UTP, a quienes reiteradamente se les descalifica su producción intelectual para negarles el reconocimiento salarial que les corresponde.
También vale la pena anotar, que dicha investigación no cubre aspectos tales como el otorgamiento de puntos salariales a producción fraudulenta, en la que los plagios son evidentes, ni hacen referencia al caso del matrimonio Arias-Portilla, cuando dos de sus “libros”, tuvieron una impresión de sólo 15 ejemplares, en un taller litográfico de la ciudad, caso documentado con la certificación correspondiente, ante la oficina de Control Interno Disciplinario, sin que hasta el momento se conozca resultado alguno de tal denuncia.
Seguimos a la espera de los resultados de nuestras denuncias ante la Fiscalía General de la Nación, la Procuraduría General de la Nación, así cómo de la definición de los procesos que internamente deben adelantarse en la Universidad.
Siete, de los doce casos de docentes transitorios en los que se reporta (HALLAZGO N° 1) que el CIARP “realizó el reconocimiento y pago de puntos salariales a 12 docentes ocasionales o transitorios sin el cumplimiento de los requisitos establecidos para tal efecto, como su tipo de vinculación, la debida divulgación y la publicación por entidades cuyos objetos de los registros mercantiles no incluyen la actividad editorial”, corresponden a personas que resultaron “ganadores” de los concursos llevados a cabo en los meses de junio y julio de 2013. Sin lugar a dudas, el reconocimiento ilegal de esa “producción académica” les dio una ventaja sobre los demás concursantes, amén de la asignación de puntaje por “CATEGORIA”, reconocida también de manera irregular y discriminatoria con otros concursantes, por la Vicerrectoría Académica o el CIARP bajo la titularidad y presidencia del Sr. William Ardila U.
¡Más claro no canta un gallo!, diría el refranero popular. No se necesita ser Sherlock Holmes para desentrañar el entuerto si, además, nos percatamos que estos “ganadores” en su totalidad hacen parte de los cuadros directivos del novel sindicato “charro”, como dicen los mexicanos o “patronal” como lo denominamos en Colombia, ASDO UTP. Traficar con reconocimiento de producción académica y amañar los procesos de los concursos se convirtió en “moneda de pago” para quienes ofician de promotores del paralelismo sindical y sumisos áulicos de la administración de turno.
El otro grupo, el de los docentes de planta (HALLAZGO N° 2), está compuesto en su gran mayoría por docentes de los Departamentos de Física y Matemáticas de la Facultad de Ciencias Básicas, dependencias académicas que bajo la égida de los Srs. William Ardila y Fernando Mesa, respectivamente, se han constituido en un micro centro de poder político en la UTP. Baste con registrar lo acaecido y denunciado profusamente en las pasadas elecciones de representante de los egresados en el Consejo Superior de la UTP. Cual directorio político, desde la dirección del Departamento de Matemáticas se promovió la candidatura de uno de los aspirantes y a los docentes, que a la vez son egresados de esta institución, se les puso cuota de votantes, para el candidato egresado y profesor de esa facultad.
Después de tanto tiempo de haber hecho públicas nuestras denuncias, los personajes de marras se pavonean por los pasillos de la universidad alardeando y exhibiendo su poder. Mientras tanto la comunidad académica de la UTP, que trabaja denodada y seriamente, espera que con la nueva administración universitaria se pueda recuperar la ética académica en los cuadros de dirección y todos los docentes gocemos de las mismas reglas de juego.
Anexamos copia escaneada del documento remitido por la CGR, para su información.
Junta Directiva Seccional de ASPU -Risaralda.
Pereira, marzo 2 de 2015
Prof. Gonzalo Arango Jiménez Prof. Alexander Díaz Arias
Presidente Secretario