Los realizadores del proyecto rompieron los límites de la oralidad y dieron paso a una iniciativa incluyente, que  propende enseñar  a través de tres elementos los signos básicos en la enseñanza del arte a comunidad no oyente, docentes y estudiantes interesados en el tema.

“Los Signos del Arte I y II” es realizado por los estudiantes de Licenciatura en Artes Visuales de la UTP, Laura Tabares, Yolima Bermúdez, Johanna Pascuas y Víctor Andrés Parra.   

Éste consta de tres piezas esenciales, la primera es el Diccionario Digital en el que se muestran todas las señas y los movimientos a realizar, el segundo es la cartilla orientadora, que involucra cada uno de los movimientos existentes paso a paso, y la tercera es una pieza artística que los estudiantes ofrecieron a la Universidad como legado del proceso realizado durante su carrera profesional.

Antecedentes

Cuando las estudiantes Laura Tabares y Yolima Bermúdez  ingresaron a la Facultad de Bellas Artes en el año 2008, se percataron de algunas problemáticas que existían dentro del vocabulario para la comunicación con las personas que presentan discapacidad auditiva, pues las otras personas no conocían las señas para ciertas palabras y con las manos hacían letras, lo cual causaba dificultades.

Fue en ese momento cuando les surgió la idea de iniciar un proyecto que diera respuesta a esta necesidad de mejorar la comunicación, y para emprender esta idea invitaron a sus compañeros Johanna Pascuas y Víctor Andrés Parra a participar de este proceso, que consistió en asignarle señas a cada palabra para mejorar el proceso educativo y la interacción con los compañeros.

“Cuando ingresé como estudiante a la Universidad me sentí un poco diferente dentro de esta comunidad de oyentes pero a medida que avanzábamos noté que nuestros compañeros se interesaban en aprender, lo que me llevó a pensar que otras personas también podían sentir ese interés pero era necesario profundizar estos temas y compartir entre todos”, afirmó Laura Tabares.

De esa forma se consolidó la idea, promovida por estudiantes de la comunidad no oyente UTP, y en la que creyeron sus compañeros que se unieron para gestar esta idea que hoy en día es una realidad, aportando no solo al tema académico sino también contribuyendo a la inclusión dentro de la Universidad, que mejora las relaciones entre los compañeros, los procesos formativos y es un legado para la comunidad en general.