Segundo comunicado a la comunidad universitaria de la UTP
Por: Carlos Andrés Echeverry Restrepo (candidato al cargo de representante de los egresados ante el Consejo Superior de la UTP)
Luego de presentar mi propuesta para aspirar al cargo de representante de los egresados ante el Consejo Superior de la Universidad Tecnológica de Pereira, algunos amigos me hicieron recomendaciones frente a ciertos puntos que pueden ser desarrollados desde esa representación, a la vez que otras personas se lamentaron porque no ofrecía un amplio ‘recetario’ de iniciativas con el fin de allegar apoyos a esta campaña.
Lo primero a aclarar es que el fin no debe justificar los medios, esto es, en aras de lograr el apoyo de los egresados no puedo caer en el lugar común que un grueso de la sociedad le reprocha a la política tradicional: prometer de todo y no cumplir nada. Podría decir que me comprometo a conseguirles trabajo en la Universidad, que crearé un capital semilla para respaldarlos durante el tiempo en que se encuentren desempleados, o que haré ingentes esfuerzos en disminuir los costos de la matrícula para postgrados a aquellos egresados con deseos de cursarlos. La cuestión es que mentiría, el cumplimiento de tales iniciativas no depende del representante de los egresados ante el Consejo Superior, algunas de ellas trascienden sus funciones al interior de dicho organismo (como aquella de procurarles trabajo en la UTP) y otras como los costos de matrícula en postgrados obedecen tanto a un consenso al interior del Consejo como a factores financieros relacionados con el punto de equilibrio económico del programa académico ofrecido.
Otro aspecto a tener en cuenta es que el cargo al cual aspiro no sólo lleva la vocería de los egresados, ni se pronuncia exclusivamente sobre ese específico sector. En el Consejo Superior de la UTP se discuten otros temas importantes que, en últimas, repercuten en el carácter público de nuestra alma mater. No miento al decir que también me preocupan otros asuntos, en principio no ligados directamente al cuerpo de egresados de la Universidad, como ocurre con el valor de las matrículas de pregrado, la forma de vinculación contractual del personal docente o los problemas democráticos en distintos espacios al interior de las Facultades, temas discutidos en mi propuesta inicial.
No obstante, considero pertinente incluir otras iniciativas que pueden ventilarse en el Consejo Superior tales como:
1. La necesidad de mejorar las condiciones salariales de los egresados que desempeñan funciones administrativas en la UTP promoviendo, a su vez, el fortalecimiento de la carrera administrativa y reconociendo –de forma similar a lo ocurrido con los profesores- estímulos salariales por estudios realizados.
2. Tratamiento equitativo, desde el punto de vista de política administrativa, a los diferentes programas de la UTP (como los ofrecidos por la Facultad de Bellas Artes y Humanidades o de Educación) para equilibrar el hasta ahora cuestionado sistema de relaciones preferenciales dado a los programas de ingenierías.
3. Apoyar una ampliación, al sector de los egresados, de algunos programas de bienestar universitario promovidos por la Vicerrectoría de Responsabilidad Social y Bienestar Universitario de la UTP.
Las anteriores no son propuestas fáciles de lograr. Mi compromiso ante la comunidad universitaria radica en llevarlas ante el Consejo superior y defenderlas en forma permanente con el propósito de justificar la necesidad de trabajar en ellas para volverlas efectivas, de ahí la necesidad de consolidar un frente integrado por el representante de los egresados, miembros de la comunidad estudiantil, docente y administrativa y, por supuesto, con el acompañamiento de la Asociación de Egresados de la Universidad Tecnológica de Pereira.
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Amigo egresado: espero contar con su valioso apoyo este 19 de agosto, de antemano agradezco su respaldo.