Información enviada por el profesor Carlos Alberto Romero, a la comunidad universitaria.Este texto es adaptado (tomado de un curso virtual). Si bien puede no estar ocurriendo así, lo ocurrido con la Ley de Salud y que nos ha afectado a todos, da para hacer interpretaciones hoy aplicables a la Ley de Educación. Es posible que, particularmente la UTP no necesite una nueva ley de educación, que los estudiantes se hayan precipitado. Puede que la vigente sea  mejor que la que se propone, puede que con los márgenes de maniobra de la actual ley podamos todavía lograr cumplir con nuestra Misión (Toda situación por mala que sea es susceptible de empeorar, se advierte en "Don Simeón Torrente ha Dejado de… Deber" de Álvaro Salom Becerra). Sin embargo, puede que una nueva ley que defina mejor la autonomía de las universidades y la democratice obligue a una mayor transparencia en los procederes de la Universidad, que hace falta. Sí es un lío.

 

7 Estrategias de manipulación mediática

1. La estrategia de la distracción
El elemento primordial del control social es la estrategia de la distracción que consiste en desviar la atención del público de los problemas importantes y de los cambios decididos por las elites políticas y económicas, mediante la técnica del diluvio o inundación de continuas distracciones y de informaciones insignificantes. La estrategia de la distracción es igualmente indispensable para impedir al público interesarse por los conocimientos esenciales, en el área de la ciencia, la economía, la psicología, la neurobiología y la cibernética. Mantener distraída la Atención del público, lejos de los verdaderos problemas sociales, cautivada por temas sin importancia real. Mantener al público ocupado, ocupado, ocupado, sin ningún tiempo para pensar; de vuelta a granja como los otros animales (cita del texto Armas silenciosas para guerras tranquilas).

¿No creen ustedes que la educación debería ser un servicio al que deberían poder llegar todos los colombianos?… Obtenga otra opinión acerca de la financiación de la educación pública …

2. Crear problemas y después ofrecer soluciones.
Este método también es llamado problema-reacción-solución. Se crea un problema, una situación prevista para causar cierta reacción en el público, a fin de que éste sea el mandante de las medidas que se desea hacer aceptar. Por ejemplo: dejar que se desenvuelva o se intensifique la violencia urbana, u organizar atentados sangrientos, a fin de que el público sea el demandante de leyes de seguridad y políticas en perjuicio de la libertad. O también: crear una crisis económica para hacer aceptar como un mal necesario el retroceso de los derechos sociales y el desmantelamiento de los servicios públicos.
Con la ley actual de educación la Autonomía Universitaria está generando problemas, hay mucha viaticadera y turismo burocrático, hay universidades que no son viables económicamente y esto no es justo para  el pueblo colombiano
Debe democratizarse la educación: debe permitirse que quienes quieran estudiar y puedan pagar, pues que fácilmente tomen un crédito e ingresen a la U

3. La estrategia de la gradualidad
Para hacer que se acepte una medida inaceptable, basta aplicarla gradualmente, a cuentagotas, por años consecutivos. Es de esa manera que condiciones socioeconómicas radicalmente nuevas (neoliberalismo) fueron impuestas durante las décadas de 1980 y 1990: Estado mínimo, privatizaciones, precariedad, flexibilidad, desempleo en masa, salarios que ya no aseguran ingresos decentes, tantos cambios que hubieran provocado una revolución si hubiesen sido aplicadas de una sóla vez.
Miremos que pasa si además de poner más control sobre la Autonomía y demandar la viabilidad económica, decimos que las universidades podrán lucrarse con las ganancias que deje el negocio. Si le ven pero a esto dentro de la propuesta de reforma a la Ley 30, quitamos lo del ánimo de lucro, pues lo quitamos y ya está. El pueblo colombiano verá que hemos ido al encuentro de los que protestan y lo tendremos a nuestro favor, ya está. Es así como hemos sacado todas las otras reformas desde el 91. Ya le tocó el turno a las EPS que se han lucrado, ahora le tendrá que tocar a otros, es democracia "entre nosotros", no?

4. La estrategia de diferir
Otra manera de hacer aceptar una decisión impopular es la de presentarla como dolorosa y necesaria, obteniendo la aceptación pública, en el momento, para una aplicación futura. Es más fácil aceptar un sacrificio futuro que un sacrificio inmediato. Primero, porque el esfuerzo no es empleado inmediatamente. Luego, porque el público, la masa, tiene siempre la tendencia a esperar ingenuamente que todo irá mejorar mañana y que el sacrificio exigido podrá ser evitado. Esto da más tiempo al público para acostumbrarse a la idea del cambio y de aceptarla con resignación cuando llegue el momento.
Tenemos que perseverar, lo del TLC con Estados Unidos estaba más difícil y mire que ya pasó, todo es cuestión de ir por pasos, ya algunos amigos en las universidades y exrectores nos están ayudando. Es que por eso es que no podemos sacar la representación de exrectores de los consejos superiores. Ya con el cambio de gobernadores la cosa quedará mejor.

5. Dirigirse al público como criaturas de poca edad
La mayoría de la publicidad dirigida al gran público utiliza discurso, argumentos, personajes y entonación particularmente infantiles, muchas veces próximos a la debilidad, como si el espectador fuese una criatura de poca edad o un deficiente mental. Cuanto más se intente buscar engañar al espectador, más se tiende a adoptar un tono infantilizante. Por qué? Si uno se dirige a una persona como si ella tuviese la edad de 12 años o menos, entonces, en razón de la sugestionabilidad, ella tenderá, con cierta probabilidad, a una respuesta o reacción también desprovista de un sentido crítico como la de una persona de 12 años o menos de edad (ver Armas silenciosas para guerras tranquilas).
¡Por Dios!, parece que esos muchachos no entendieran el sacrificio que hacen sus padres. El problema es que la juventud es así, es irreflexiva, ligera en sus apreciaciones, todos hemos tenido alguna vez ese envidiable espíritu revolucionario. Varios de los que estamos aquí en la Comisión Sexta de la Cámara y que estudiamos en la Nacho participamos de los movimientos de los años 70 y sabemos que aún entonces, la mayoría cuando votaban para presidente no tenían idea de por qué votaban, la mayoría de los que protestan y se quejan no saben por qué lo hacen.

6. Utilizar el aspecto emocional mucho más que la reflexión
Hacer uso del aspecto emocional es una técnica clásica para causar un corto circuito en el análisis racional, y finalmente al sentido critico de los individuos. Por otra parte, la utilización del registro emocional permite abrir la puerta de acceso al inconsciente para implantar o injertar ideas, deseos, miedos y temores, compulsiones, o inducir comportamientos…
Póngase la mano en el corazón y no me diga que usted no quisiera que todos los jovenes que salen de bachillerato pudieran "pagarse" una universidad pública, responsable, pluralista y crítica.

7. Reforzar la autoculpabilidad
Hacer creer al individuo que es solamente él el culpable por su propia desgracia, por causa de la insuficiencia de su inteligencia, de sus capacidades, o de sus esfuerzos. Así, en lugar de rebelarse contra el sistema económico, el individuo se autodesvalida y se culpa, lo que genera un estado depresivo, uno de cuyos efectos es la inhibición de su acción. Y, sin acción, no hay revolución!
No se queje si usted o su hijo no puede terminar la carrera este semestre, ... La Universidad está haciendo todo lo posible para aumentar la retención y reducir la deserción, es mucho el dinero que la Universidad está invirtiendo en cada estudiante, fíjese, hay estudiantes que llevan en la Universidad hasta 14 semestres, pero ahí van, siguen estudiando, no se meten en líos, saben que primero está el estudio.

 
Carlos Alberto Romero

Profesor Escuela de Tecnología Mecánica
Universidad Tecnológica de Pereira