La Facultad de Tecnología de la Universidad Tecnológica de Pereira vivió una experiencia única con la realización de las Vacaciones Tecno-Recreativas, un espacio pensado no solo para la diversión, sino también para sembrar en niños y niñas la semilla del interés por la tecnología como camino para transformar su futuro. 

Con una participación constante de 23 niños y el acompañamiento comprometido de padres de familia, el programa se desarrolló en un ambiente lleno de entusiasmo, creatividad y exploración. Según lo expresó Martha Lucía Franco Laverde, profesional de apoyo de la Facultad de Tecnología, la iniciativa fue el resultado de una planificación cuidadosa y un trabajo colectivo que dejó resultados altamente positivos. 

“Las vacaciones tecno-recreativas vividas en la Facultad de Tecnología fueron un éxito total. Fue un proceso planeado con mucho profesionalismo por parte de todo el equipo organizador y, además, porque la actitud de los participantes fue siempre de gran apertura, no solo de los niños, sino también de los padres que trajeron a sus hijos con amor y esperanza de que vivieran una experiencia inolvidable. Hicimos todo lo posible porque eso fuera un hecho”, comentó Martha Lucía. 

Durante estos días, los niños no solo se divirtieron, sino que exploraron el mundo de la tecnología a través de visitas a laboratorios, talleres creativos, interacción directa con docentes y actividades que fortalecieron su perfil emprendedor. Todo en un entorno pedagógico diseñado para despertar la curiosidad y mostrar que la educación tecnológica es una vía real y poderosa hacia el crecimiento personal y profesional. 

Nos sentimos felices y orgullosos porque esta idea, que nació en un consejo de facultad, se convirtió en una experiencia transformadora. Queremos que desde ya los niños empiecen a ver en la formación tecnológica una alternativa para posicionarse en el mundo y generar cambio”, añadió Franco Laverde. 

La satisfacción fue total: los 23 niños que iniciaron el programa también lo concluyeron, manifestando su alegría y emoción por lo aprendido y vivido. Esta iniciativa no solo logró cumplir sus objetivos, sino que abrió la puerta para futuras ediciones que sigan inspirando a nuevas generaciones. 

Desde la Facultad de Tecnología, el mensaje es claro: la educación tecnológica puede y debe comenzar desde temprano, y hacerlo de forma lúdica y significativa es la mejor manera de acercar a los niños a su propio potencial. Las Vacaciones Tecno-Recreativas son prueba viva de ello.