En el auditorio Jorge Roa Martínez, rodeado de un ambiente de expectativa y concentración, se llevó a cabo el esperado examen de admisión de la Facultad de Ciencias de la Salud para el programa de posgrado en especialidades médico-quirúrgicas. Este proceso, liderado, entre otros, por el director de la Escuela de Posgrado de la Facultad, Adrián Cabrales Vega, marca el inicio de un riguroso ciclo de selección de nuevos residentes.

Sergio Cabrera
Sergio Cabrera

“La importancia de este examen radica en que representa la puerta de entrada para nuestros programas de posgrado médico-quirúrgico”, comentó Cabrales, destacando que el examen evalúa conocimientos fundamentales de medicina general y especialidad. El examen, explicó, consta de 50 preguntas divididas en dos secciones: 30 enfocadas en medicina general y 20 en la especialidad elegida. Los candidatos que superen esta primera fase enfrentarán una segunda evaluación basada en desempeño.

Cabrales detalló que esta segunda fase depende de la especialidad elegida: “En cuidados críticos, por ejemplo, los aspirantes realizarán pruebas de simulación, mientras que en psiquiatría se llevarán a cabo evaluaciones con pacientes en una institución de salud mental”. Este sistema de selección incluye además la valoración de la hoja de vida, considerando aspectos como el promedio académico y experiencias previas en investigación, un requisito que busca garantizar la formación de residentes de alto nivel.

Para la mayoría de los aspirantes, el proceso representa un gran desafío, ya que solo aquellos con el mejor rendimiento académico y práctico alcanzarán la oportunidad de formarse en este prestigioso programa. “Aseguramos que los residentes disfruten de un trato humanizado y de un ambiente de bienestar, donde el trabajo en equipo y los valores éticos y tecnológicos son prioritarios”, añadió Cabrales.

Este enfoque de excelencia, según Cabrales, es una de las razones por las cuales la Facultad de Ciencias de la Salud, con acreditación nacional e internacional, se mantiene como una de las más reconocidas en la región. Con estas palabras de aliento, Cabrales concluyó con un mensaje inspirador para los aspirantes: “Nuestra facultad es una institución de altísima calidad, y quienes aquí se formen estarán capacitados para enfrentar los retos de la medicina con competencia y valores humanos”.