Durante el segundo semestre del 2025, el Centro de Gestión Ambiental de la Universidad Tecnológica de Pereira lideró el reto SE-PARAR, una pausa activa con propósito ambiental, una estrategia pensada para reducir el uso de bolsas plásticas y fortalecer la separación adecuada de residuos en distintas dependencias de la institución.







La iniciativa se desarrolló entre los meses de julio y noviembre, con un piloto en seis dependencias: el Laboratorio de Aguas, el CRIE, la Vicerrectoría de Responsabilidad Social y Bienestar Universitario, Admisiones, Registro y Control Académico, la Oficina de Gestión del Talento Humano y el Centro de Gestión ambiental, a través de su oficina de SUEJE.
“La idea era reducir el uso de bolsas plásticas, aprender a separar correctamente los residuos de acuerdo con el código de colores y, al mismo tiempo, invitar a las personas a hacer una pausa activa durante la jornada laboral”, explicó Ana María Mejía, profesional de proyectos del Centro de Gestión Ambiental.
La estrategia se realizó en alianza con la Oficina de Seguridad y Salud en el Trabajo, incorporando hábitos de bienestar en el proceso. El seguimiento se llevó a cabo de lunes a viernes con el acompañamiento del personal de ASSERVI, quienes verificaron la correcta separación de residuos en cada una de las oficinas participantes.
Tras la evaluación final del proceso, se premió a la Oficina de Gestión del Talento Humano por su participación propositiva, el interés por conocer el destino de los residuos y el uso de las estrategias institucionales disponibles para fortalecer la cultura ambiental dentro de la universidad.
Más allá del premio, el reto SE-PARAR, una pausa activa con propósito ambiental, dejó aprendizajes cotidianos sobre cómo pequeñas acciones, integradas a la rutina de trabajo, pueden aportar a una gestión ambiental más consciente y responsable en la UTP.








