La Facultad de Tecnología de la Universidad Tecnológica de Pereira realizó una nueva edición del Día del Vuelo, una jornada académica y familiar en la que estudiantes de pregrado y maestría presentaron las aeronaves que diseñaron, calcularon, construyeron y finalmente pusieron a prueba tras un semestre de trabajo en el Laboratorio de Aeronáutica.




Desde hace seis años, la UTP ha fortalecido su apuesta por la aeronáutica con la creación de una línea de investigación, dos laboratorios especializados y una asignatura electiva que hoy beneficia a estudiantes de Mecatrónica, Mecánica e Ingeniería Física. Gracias a este proceso, los futuros ingenieros se acercan a un campo que integra conocimientos de distintas áreas y que despierta gran interés académico.
El evento se llevó a cabo en la pista de Chinchiná, donde un piloto certificado fue el encargado de realizar las pruebas de vuelo de cada aeronave. Esta dinámica permitió resaltar la diferencia entre aviación relacionada con la operación y la tripulación y aeronáutica, enfocada en los fundamentos de ingeniería que los estudiantes aplican durante el semestre.
El Día del Vuelo reunió a estudiantes de la Facultad de Tecnología y a participantes de maestría de la Facultad de Ciencias Básicas, quienes vivieron una jornada formativa acompañada por los docentes. También fue un espacio abierto a las familias y acompañantes, que participaron y celebraron los logros de los equipos en un ambiente cercano y participativo.
El Docente Adonai Zapata, líder del proceso formativo en aeronáutica, destacó la importancia de que los estudiantes vivan una experiencia completa, desde el diseño hasta el vuelo final. “Cuando los chicos ven que lo que construyen funciona, se emocionan y entienden el valor de lo que aprenden en clase”, afirmó. Para él, el Día del Vuelo no solo demuestra resultados técnicos, sino que fortalece el trabajo en equipo y la confianza en las capacidades de cada grupo.



La actividad fortaleció el desarrollo integral de los estudiantes al combinar conocimientos técnicos como matemáticas, física, diseño, manufactura y programación con habilidades blandas esenciales: trabajo colaborativo, liderazgo, puntualidad, compromiso y comunicación.
La Facultad de Tecnología resalta que estas experiencias contribuyen a formar ingenieros íntegros, capaces de aplicar sus aprendizajes en escenarios reales y de desenvolverse con eficacia en el trabajo en equipo.








