El Mercado Agroecológico de la Universidad Tecnológica de Pereira cerró su ciclo anual con una jornada llena de aromas, saberes y comunidad. Productores, estudiantes y visitantes se dieron cita en el corazón del campus para compartir, aprender y celebrar la conexión entre la universidad y el campo.








Entre los asistentes estuvo Salomé Espina, estudiante de décimo semestre de Licenciatura en Tecnología, quien vivió con nostalgia su último mercado como estudiante. Cada primer miércoles del mes fue una cita marcada en su calendario “Siempre espero el primer miércoles del mes. Es un día para reunirme con amigos, comprar el quesito, el sándwich del primer puesto con sus encurtidos deliciosos… y disfrutar de algo que ya es tradición en la U”, contó Salomé.
Para ella, el Mercado Agroecológico no era solo un lugar para comprar productos naturales, sino un espacio para reconectarse con la vida universitaria desde lo cotidiano: los olores, los sabores y las conversaciones espontáneas “Me gusta que sea dentro de la universidad, que uno pueda compartir algo tan bonito y productivo. Además, ver cómo estos emprendimientos crecen y promueven lo natural me hace sentir orgullosa de estudiar en una universidad que apoya estas iniciativas”, añadió.
Ese sentido de pertenencia fue compartido también por productores que llegaron desde distintas regiones del país. Desde Ibagué, Margarita Rosa Enciso, de Orgánicos La Comarca, participó junto a su esposo presentando productos como jarabe de totumo, estevia líquida y pomadas elaboradas con plantas medicinales de su finca. “Somos apasionados por cuidar el planeta. Traemos productos que nacen del amor por la tierra. Gracias a la universidad, por acogernos, por abrirnos este espacio tan bonito”, expresó Margarita, destacando la oportunidad que estos encuentros representan para los pequeños emprendimientos campesinos.
El mercado también fue punto de encuentro para estudiantes como Brian García y Daniel, de la Facultad de Ingeniería Eléctrica, quienes resaltaron el valor de acercar el campo a la vida universitaria.“Es muy chévere ver a los productores acá, poder probar miel, yogur o artesanías. Eso acerca mucho más la universidad a la realidad de nuestro entorno rural”, comentó Daniel.
Durante la jornada, el Mercado Agroecológico se integró al Reto UTP Sustentable, una estrategia institucional que promueve acciones de sostenibilidad en la comunidad universitaria. “Hoy estamos participando del reto, donde tenemos que estar en el mercado, visitar el Jardín Botánico, recorrer el punto de reciclaje y visitar los libros”, contó una de las participantes, quien destacó cómo este tipo de actividades fortalecen la conciencia ambiental desde la experiencia.
Con este último mercado, la UTP cerró un año de aprendizaje, comunidad y compromiso con el desarrollo sostenible. Un espacio que, más allá de los productos, siembra conciencia, fortalece la relación con el territorio y deja en cada visitante la sensación de que cuidar el planeta también empieza en el campus.








