A sus 26 años, Mariana Porras Castaño culmina con orgullo su proceso de formación como Ingeniera Industrial de la Facultad de Ciencias Empresariales de la Universidad Tecnológica de Pereira, marcando un hito no solo en su vida personal, sino también en la historia de su familia, al convertirse en la primera mujer profesional del hogar.

Originaria de Anserma – Caldas, Mariana vivió durante veinte años en España, donde creció junto a su madre. Sin embargo, su deseo de estudiar en Colombia y formarse en una institución reconocida por su excelencia académica la llevó a tomar una decisión valiente: regresar al país para iniciar una nueva etapa en la UTP, una experiencia que, como ella misma describe, transformó su manera de ver el mundo.

Al llegar a Pereira, la acompañó una nueva amiga y compañera incondicional: Pachanga, una perrita que adoptó al poco tiempo de establecerse en la ciudad. Juntas compartieron los retos, alegrías y aprendizajes de estos cinco años de formación universitaria. “Pachanga ha sido mi familia aquí. Ella ha estado conmigo en cada entrega, cada desvelo y cada logro” cuenta con emoción. 

Durante su paso por la Universidad, Mariana participó activamente en diferentes espacios académicos, destacándose por su compromiso y liderazgo. En el año 2023 inició como monitora del Laboratorio Financiero, experiencia que —según ella— fue determinante en su crecimiento personal y profesional.

“El laboratorio financiero me dejó muchas enseñanzas. Allí no solo me formé como profesional, sino también como persona. Entendí que nada ganamos con ser excelentes en lo técnico si no somos buenas personas, si no tratamos con respeto y empatía a todos los que nos rodean”, afirma.

A lo largo de su proceso, Mariana reconoce el apoyo de varios ingenieros del laboratorio, quienes se convirtieron en una familia académica y humana durante su formación. “En el laboratorio siempre nos impulsaron a romper ese techo de cristal, a creer en nuestras capacidades y a sacar lo mejor de nosotros. Fue un espacio que me enseñó a rendirme ante los retos, pero también a superarlos con esfuerzo y determinación”.

En marzo de 2025, Mariana inició sus prácticas profesionales en el área de investigación y gestión administrativa, las cuales finalizó hace pocos días. Esta etapa consolidó su interés por la investigación y la innovación, motivándola a continuar su camino en la academia y el desarrollo de proyectos con impacto social.

Además, se desempeñó como líder del semillero de investigación de Ingeniería Industrial, desde donde promovió la participación estudiantil en procesos investigativos. “A los jóvenes les diría que se animen a investigar, a participar en los semilleros y en espacios como el laboratorio financiero. La investigación transforma nuestra manera de pensar y nos ayuda a cambiar procesos, a transformar personas y, sobre todo, a aportar al bienestar social”, expresa Mariana. 

Hoy, al recibir su título profesional, Mariana mira hacia atrás con gratitud y orgullo. Reconoce que su paso por la Universidad Tecnológica de Pereira le brindó no solo una formación sólida, sino también un hogar, una comunidad y una visión de futuro. “Ser parte de la UTP fue una experiencia que me cambió la vida. Aquí aprendí que los sueños se construyen con esfuerzo, disciplina y pasión. Me voy feliz de haber crecido en un entorno que cree en el talento y las oportunidades”.

La historia de Mariana Porras Castaño es un testimonio de resiliencia, determinación y amor por el conocimiento, valores que reflejan el espíritu de quienes hacen grande a la Universidad Tecnológica de Pereira.