Un espacio moderno y transformador que marca una nueva etapa en el acceso al conocimiento en la Universidad Tecnológica de Pereira
La Biblioteca Jorge Roa Martínez de la Universidad Tecnológica de Pereira se ha consolidado como referente nacional e internacional gracias a la calidad de sus servicios bibliotecarios, su innovación tecnológica y su efectiva gestión del conocimiento. Estos atributos la han llevado a ocupar el segundo lugar a nivel nacional y el octavo en Latinoamérica, según el más reciente informe del Ranking Bibliotecas, un estudio internacional que evalúa el desempeño de 3.958 bibliotecas universitarias en 43 países.








Con el respaldo de la Oficina de Planeación y el liderazgo de la Dirección de la Biblioteca, la Universidad Tecnológica de Pereira presentó oficialmente la Sala Aprender, un espacio transformador que marca el inicio de una nueva etapa para la Biblioteca Jorge Roa Martínez.
Este proyecto institucional, que llega a su primera fase de tres, ha sido liderado durante los últimos meses por el equipo de la biblioteca bajo la dirección de Margarita María Fajardo, con el acompañamiento técnico de la Oficina de Planeación, dirigida por Francisco Antonio Uribe. La iniciativa ha permitido crear espacios modernos, accesibles y funcionales, donde el bienestar y la comodidad son ejes centrales.
La Sala Aprender fue concebida como un espacio versátil y dinámico que permite a los usuarios estudiar con comodidad, explorar contenidos, interactuar con sus pares y acceder libremente a las colecciones físicas. Con ambientes de trabajo colaborativo, nichos semi-privados y zonas para la socialización, esta sala se convierte en el corazón de un concepto bibliotecario que trasciende lo tradicional, integrando lo académico con lo experiencial, lo cultural y lo colectivo.
Una biblioteca en transformación constante
Durante el evento de inauguración, el rector de la Universidad, Luis Fernando Gaviria Trujillo, resaltó el papel estratégico que ha tenido la biblioteca a lo largo de la historia institucional y su reciente posicionamiento:
“Hoy podemos enorgullecernos porque la biblioteca es la segunda más importante del país. No es solo por tener libros o bases de datos, sino porque ha evolucionado, ha innovado todo el procedimiento de lo que debe hacer una biblioteca”.
También recordó el papel de la UTP en la creación del Consorcio Colombia, que hoy fortalece el acceso a recursos digitales de calidad mediante una negociación en bloque con universidades públicas y privadas del país. “Esto es gran parte de lo que hoy representa la Biblioteca”, enfatizó.
Por su parte, el jefe de la Oficina de Planeación, Francisco Uribe, destacó el trabajo articulado con la biblioteca:
“Desde que estructuramos el proyecto con Margarita, nos lo imaginamos completo, aunque lo estemos ejecutando por fases. Esta es la primera etapa de tres. Ya está en contratación la segunda fase, con una inversión similar, e incluso un poco mayor, que incorporará el cambio total del techo en otra de las salas”.
Asimismo, resaltó la manera en que se garantizó la continuidad del servicio: “Margarita nos dijo desde el inicio: ‘yo necesito garantizar siempre la calidad y la prestación del servicio’. Por eso se programaron cuidadosamente las adecuaciones, priorizando el bienestar de los usuarios”.
Acceso directo al conocimiento
Margarita María Fajardo, directora de la Biblioteca, explicó la dimensión del cambio:
“Por primera vez, después de más de 35 años, abrimos el 85% de nuestras colecciones físicas que antes estaban tras un mesón. Esto significa que alrededor de 80.000 volúmenes estarán ahora al alcance directo de nuestros usuarios, sin intermediarios ni tiempos de espera”.
Y añadió:
“Pasamos de custodiar libros a facilitar el acceso libre al conocimiento. Ya no somos solo guardianes del saber, sino expertos en la formación de usuarios autónomos, capaces de buscar, evaluar y usar información de calidad. Esta transformación nos permite conectar con la academia, la investigación, la cultura, y también con los más pequeños y todo aquel que desee disfrutar de la lectura en un ambiente acogedor”.
La obra entregada comprende una intervención de 300 m², con capacidad para 100 personas y una inversión cercana a los 560 millones de pesos. Incluyó rehabilitación de cubierta con teja termoacústica, adecuaciones civiles, eléctricas y nuevo mobiliario.
La apertura de la Sala Aprender marca un nuevo capítulo en la historia de la Biblioteca Jorge Roa Martínez, consolidando su papel como un espacio clave para la formación integral, la construcción de comunidad y la generación de conocimiento. Este avance no solo mejora la infraestructura, sino que transforma la experiencia de quienes hacen parte de la UTP, al brindar un entorno que estimula la curiosidad, el pensamiento crítico y el aprendizaje colaborativo.