Aunque la vacuna no es un condicionante para la presencialidad, entre más rápido haya una mayor cantidad de estudiantes vacunados, más viable es su retorno a las aulas. 

Varias son las acciones que se contemplan en aras de garantizar un retorno de forma sucesiva y continua, pero además en aumento, de los estudiantes al Campus universitario a partir del segundo semestre académico del 2021.

Según se ha decidido por parte de las directivas de acuerdo a la normatividad nacional, reglada por la resolución 777 de 2021, el semestre académico empezará con unas materias virtuales y algunas prácticas presenciales, mientras avanza el proceso de vacunación y los diferentes programas pueden garantizar la bioseguridad de sus estudiantes en la presencialidad.

Sobre las condiciones mínimas desarrolladas en la actualidad de forma simultánea y progresiva por parte de las distintas áreas de la UTP para avanzar hacia la presencialidad, conversamos con Pablo César Tabares Quintero, Coordinador del Sistema de Gestión de Seguridad y Salud en el Trabajo.

Periodista: ¿Qué se ha decidido en la universidad con respecto a la presencialidad? o por lo menos con respecto a la gradualidad en ese retorno al campus.

Pablo Tabares: Para el segundo semestre del año 2021 la Universidad ha tomado de la decisión, y en consecuencia de la normatividad vigente, de aperturar gradualmente y de manera progresiva el proceso de la  presencialidad y para esto se está preparando de la siguiente manera: el primer punto de partida es el cumplimiento de los protocolos de bioseguridad, que ya vienen siendo aplicados en el campus desde el primer semestre del año 2020, pero que hoy en día han sido restructurados en consecuencia de las nuevas normas que están vigentes en este momento como la resolución 777 del 2021. Así las cosas, esa presencialidad tiene como punto de partida el cumplimiento de los protocolos y, a partir de allí, el proceso de vacunación de nuestros estudiantes, de nuestros colaboradores administrativos y de nuestros docentes y personal de apoyo. Recordemos que iniciamos el proceso de vacunación con el personal docente, administrativo y de apoyo y que ahora estamos en el proceso de vacunación de nuestros jóvenes, así que el avance en el proceso de vacunación es la forma inicial de tener la claridad para esa presencialidad, pues a medida que va avanzando ese plan de vacunación, vamos tomando las decisiones del retorno gradual a la presencialidad académica.

Periodista: Y en ese orden de ideas, ¿cuándo se sabrá si el próximo semestre que ya casi inicia va a ser presencial o va a ser virtual?

Pablo Tabares: Vamos a iniciar con un modelo mixto, lo que significa que damos inicio con el semestre de manera virtual con algunas materias mediadas por las TIC y en algún momento del semestre van a ser llamados a un proceso de prácticas académicas presenciales. Esas prácticas académicas son reportadas por los directores de cada programa a su respectiva facultad y la facultad la reporta la Vicerrectoría Académica para obtener todo el balance de los jóvenes que van a ingresar al campus a desarrollar sus procesos de prácticas. Ese es el primer modelo que ya hemos venido implementando en estos últimos tres semestres, pero adicionalmente vamos a tener una presencialidad que va a ser escalonada en relación a la metodología de vacunación o al avance de vacunación por facultades y programas. Si los jóvenes asisten al proceso vacunación oportunamente, a las citas que se aperturan en La Julita u otros centros de vacunación del departamento, si lo hacemos de forma masiva rápidamente, a medida que se vayan vacunando se van tomando las decisiones de empezar a ingresar con esa manera escalonada de los jóvenes vacunados a los diferentes programas.

Adicionalmente la universidad se está preparando tecnológicamente y locativamente. Se están adecuando unas salas, salones y auditorios con tecnología para permitir una alternancia presencial, que significa que existan personas haciendo la presencialidad, previamente vacunados, y que en los salones de clase los jóvenes que no estén vacunados o que todavía no puedan acceder al proceso porque por los aforos no puedan estar en el aula de clase, puedan ver la clase de manera paralela con los que estén presencial en la universidad.

Periodista: Y ¿cómo se está preparando la universidad para esas personas que ya van a poder ingresar según los aforos?

Pablo Tabares:  Es una labor que se hace de manera sincronizada entre dos áreas específicamente, el área de Servicios Institucionales y Mantenimiento con el área de Seguridad y Salud en el Trabajo. En la primera parte del proceso, cuando se hace la solicitud por parte de la decanatura de la necesidad de aperturar o de tener una disponibilidad de salones, asistimos a ese lugar y verificamos el espacio físico para saber cuántas personas pueden, de manera segura, estar ubicadas en ese lugar y así se definen los aforos mediante una inspección de seguridad, luego de definir los aforos y los lugares en los cuales se puede hacer presencialidad, se establecen las jornadas de aseo y desinfección de acuerdo a la programación de clases que tenga el salón o auditorio, previamente suministrada por la facultad o la dirección del programa, así mismo desde el área de mantenimiento se verifica la cercanía de los puntos de lavado de manos, de desinfección, al igual que el uso de las baterías sanitarias y se ubican todos los medios de bioseguridad que sea necesarios.

Cuando tenemos la claridad de las personas que van a ingresar al campus, se establece el suministro de elementos de protección personal, para casos particulares de los jóvenes que asisten a prácticas como requisito de grado, pues cuando ellos están en este proceso de prácticas son afiliados a la ARL y allí nos compete a nosotros hacer la entrega de los elementos de protección personal. Los demás estudiantes deben de traer sus elementos de protección personal lo cual es una obligación, sin embargo, por tratarse de un tema de salud pública, en los momentos en que dentro del campus vemos personas sin los elementos, se los suministramos. Así mismo, continuamos con el control de ingresos que nos reportan, nosotros habilitamos en las porterías el ingreso de esas personas, se les toma la temperatura, se registran, se verifica que realmente sean reportados, se verificará su proceso de vacunación, si cuentan con las dos dosis completas y su diligenciamiento del formulario de estado de salud.

Cuando ya estén definidas las personas para la presencialidad, hay un proceso de inducción con ellos, hacemos uso de la plataforma de Univirtual y a este grupo de estudiantes les enviamos un link donde existe una presentación de los protocolos de bioseguridad de la universidad, el cual deben ver muy bien y responder a las preguntas de una evaluación final para quedar habilitados.

Periodista: Hablemos ahora entonces del aforo de la Universidad de acuerdo al número de estudiantes matriculados y a los espacios que tiene la universidad, ¿Qué cantidad de estudiantes se prevé van a poder empezar en la presencialidad?

Pablo Tabares:  Eso se va a definir en cumplimiento de la resolución 777 del 2021 que obliga a un distanciamiento de un metro, sin embargo, en este momento no podemos asegurar cuál es el aforo de la Universidad completa, sino que depende de cada espacio en particular, de acuerdo al mobiliario, a la condición logística y a las adecuaciones que tenga. Nosotros vamos con un metro en la mano a cada uno de esos lugares, tomamos las medidas y definimos la separación de cada uno de los colaboradores que van a estar en esa área de trabajo y así mismo será en los salones, por consiguiente, es muy complicado decir que si es una comunidad de 20.000 personas, van a entrar 10.000, no funcionaría así, cada lugar tiene una particularidad y por eso hacemos este tipo de verificaciones antes de pensar en la presencialidad.

Periodista: A propósito de esto nos falta hablar de, ¿Por qué es importante que se diligencie la encuesta de vacunación en el proceso de regreso al campus?

Pablo Tabares:  La universidad Tecnológica de Pereira cuenta en este momento con un centro de vacunación ubicado en las instalaciones de La Julita, ese centro de vacunación se suma a otros centros más que tiene el departamento y que hacen parte de la estrategia Nacional de vacunación en Colombia, por lo tanto, las personas, los jóvenes estudiantes, los administrativos, los docentes, el grupo de apoyo, puede hacer uso de su proceso de vacunación en las instalaciones de la UTP pero también pueden hacer uso de su proceso de vacunación en cualquier otro centro de vacunación de la ciudad, como lo es Expofuturo, como lo son las EPS.

Cuando las personas se nos vacunan en nuestro centro de vacunación de La Julita, claramente sabemos quiénes se han vacunado, cuántas dosis tienen y cuánto es su tiempo de inmunidad, pero cuando las personas se nos vacunan en otros centros, nosotros no tenemos esa información y por lo tanto la manera de poder capturar esa información es mediante una encuesta que le dirigimos a los estudiantes para que nos cuenten en dónde se han vacunado, si ha sido con nosotros o si no ha sido con nosotros, en cuál lugar y cuándo fue la fecha de aplicación de ese inmunológico, y cuándo y cuál es la marca del mismo, cuál es el laboratorio, con esa información nosotros la procesamos y sabemos realmente  en nuestro campus cuántas personas nos faltan por el proceso de vacunación.

Estas son acciones que se están desarrollando, estructurando y aplicando con miras a la presencialidad total, por lo que de manera inicial la alternancia sigue siendo la modalidad utilizada por la UTP para el segundo semestre de 2021.